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    Una española, entre los tres mejores cirujanos vasculares jóvenes del mundo

    Sandra Vicente Jiménez recibe una beca de 5.000 dólares para financiar su formación de postgrado

    Redacción

    Sandra Vicente, tiene 39 años y su trabajo acaba de ser reconocido por la Sociedad de Cirugía Vascular de Estados unidos. Tras formarse en medio mundo y volver de Houston, esta madrileña, natal de Alcorcón, podrá seguir preparándose gracias a este reconocimiento.

    En Houston son punteros en técnicas para minimizar las estancias en hospitales y hacerlo de una manera poco invasiva. Esto es lo que he ido buscando para traerlo a nuestro hospital”, explica a TVE la propia premiada. Sandra trabaja como cirujana vascular de la Unidad de Angiología y Cirugía Vascular del Hospital Universitario Fundación Alcorcón, en Madrid, que esta semana está de celebración.

    Esta doctora se ha traído al hospital público de Alcorcón técnicas ecográficas para la detección precoz y tratamiento quirúrgico del conocido como pie diabético.

    Sandra Vicente, con traje amarillo

    Mejorar el manejo de esta condición es crucial para reducir la morbilidad y mortalidad asociadas a ellas. La unidad en la que trabaja esta doctora atendió el año pasado cerca de 4.000 consultas relacionadas con el pie diabético, lo que resalta la importancia de implementar nuevas técnicas para mejorar la atención de los pacientes.

    La Sociedad de Cirugía Vascular de Estados Unidos selecciona anualmente a los mejores cirujanos vasculares menores de 40 años de todo el mundo, exceptuando de Estados Unidos y de Canadá. 

    Además de la invitación a la reunión anual de este organismo, el premio incluye una beca de 5.000 dólares para financiar una formación de postgrado en el hospital que elija en Estados Unidos o Canadá. Vicente ha elegido la Clínica HOPE, de Houston, donde se formó con el equipo del doctor Miguel Montero-Baker, especialista en cirugía de este tipo. 

    “Tenemos que tener la posibilidad de hacer ciencia en los hospitales públicos. Muchas veces es difícil por la presión asistencial, hay muchas consultas y quirófanos”, remarca la cirujana, quien considera que es esencial dejar margen para analizar los datos que se van obteniendo.

    Fuente: rtve