Redacción
La empresa Zeva ha impulsado una nueva forma de volar que tiene que superar numerosas barreras. Se trata de un platillo volante eléctrico capaz de alcanzar los 1.000 metros de altura, a 250 Km/h y boca abajo.
Eso es lo que propone Zeva Zero, el platillo unipersonal, que empezará a funcionar con personas “en semanas“. Se trata de volar en un eVTOL, un vehículo eléctrico de despegue y aterrizaje vertical.
Es un vehículo circular de solo 2,6 metros de diámetro, fabricado con fibra de carbono, que pesa 317 kilos. El pasajero / piloto se introduce por la parte trasera. Zeva Aero despega en posición vertical, gracias a sus cuatro motores eléctricos dotados de dos hélices cada uno.
Básicamente despega como un dron. Pero cuando ha alcanzado la altura suficiente, se coloca en posición horizontal, y el pasajero se queda mirando boca abajo… a 1.000 metros de altura y 250 Km/h.
Además, al tratarse de un vehículo personal, exige que todo el que lo use se saque una licencia de piloto. Zeva afirma en New Atlas que el objetivo es que “todo el mundo tenga uno en su garaje en 2040“, pero un vehículo volador unipersonal para todo el mundo es muy complicado que pase las certificaciones.
Es más factible como vehículo de rescate y emergencias, e incluso como vehículo militar. La mayoría de sus problemas se pueden resolver si se adapta al vuelo autónomo, algo que sus creadores ya están implementando.
Fuente: New Atlas
