La ONG internacional asegura que se debería reducir a la mitad la huella ecológica que dejan los modelos de producción y consumo vigentes
Redacción
Limpiar el planeta parece cada vez más una misión imposible. Sin embargo, hay por dónde empezar sin necesidad de ahogarse en ecuaciones inimaginables y tecnológicas inalcanzables. En vez de ver todas las dificultades y carencias que nos sobran para llegar al objetivo de un planeta más limpio y sustentable, es posible comenzar a mirar el tema centrándonos en una perspectiva social, enfocando el problema a escala humana.
Una publicación reciente del World Wildlife Fund (o Fondo Mundial de la Naturaleza; WWF, por sus siglas del inglés ) sostiene que reducir a la mitad la actual huella ambiental, generaría 39 millones de nuevos puestos de trabajo por año, en todo el mundo. Además de todos los beneficios que le daría al planeta.
El documento, elaborado por Dalberg Advisors, precisa tres cambios de enfoque necesarios: 1º.- contabilizar de nuevo el capital natural de las naciones y de las empresas; 2º.- producir alimentos de manera sostenible; y 3º.- implementar modelos de economía circular que sólo dejen un mínimo de residuos y que no requieran tanto empleo de recursos naturales.
El químico italiano Marco Lambertini, que comenzó su vínculo con WWF como voluntario y desde 2014 es el director general fue tajante: “hay que reformar nuestro modelo actual de producción y consumo in-sostenible”.
El WWF ve con preocupación que el planeta no esté respondiendo “adecuadamente” a la crisis de la naturaleza. Y es todo un círculo vicioso: eso pone en peligro la capacidad para abordar la crisis climática y al mismo tiempo pone en peligro los recursos de los que dependen las economías de los países; es decir la supervivencia de la población mundial.
La tercera ronda de las negociaciones internacionales para lograr un nuevo acuerdo mundial sobre biodiversidad han comenzado esta semana, de forma virtual, en el marco del Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB). En octubre de este año deberá estar listo un plan final que debería discutirse en forma presencial en la 15a Conferencia de las Partes del CDB en Kunming, China (COP15), que se postergó hasta el año 2022.
Ciento noventa y cinco estados, la Unión Europea y todos los estados miembros de la ONU –excepto Estados Unidos- ratificaron el Convenio sobre la Diversidad Biológica (Río de Janeiro, 1992). Entre ellos, 89 estados respaldaron el compromiso de revertir la pérdida de biodiversidad de aquí al año 2030. Esperemos que cumplan con lo que firmaron y algunos ya ratificaron.
Fuente: World Wild Life