El científico checo cree que en el mundo hay más progreso que regresión, “aunque la regresión siempre acecha”
Redacción
El científico y analista de origen checo, profesor emérito en Manitoba (Canadá), ha reescrito la historia de la civilización poniendo el foco en la energía. Su saber poliédrico está basado en hechos y recogido en libros como el recientemente publicado Energía y civilización. Una historia (Arpa) o Los números no mienten: 71 historias para entender el mundo (Debate).
Inquieto, atento y puntilloso, Vaclav Smil (Pilsen, República Checa, 1943) es la viva imagen de un sabio. Lleva 40 años investigando el retorno energético. Está tan acostumbrado a la precisión de los datos que cualquier pregunta le parece generalista. Habla desde su casa de Winnipeg, en Canadá, donde llegó hace casi medio siglo y vive con su esposa, sin teléfono móvil. Jubilado como profesor de medio ambiente en la Universidad de Manitoba, asegura que en el mundo hay más progreso que regresión, “aunque la regresión siempre acecha”.
Estamos en una economía global, pero no existe una solución global igual para todos. El mundo occidental olvida eso. El coste de reducir emisiones no debe ser proporcional, sino a la carta. No es lo mismo crecer para sobrevivir que para expandir la economía. Fíjese en la India. Está a punto de sobrepasar a China como el país más poblado del mundo [la ONU lo espera para 2027], sin embargo consume un tercio menos de energía.
Ahora bien, ¿quién es este misterioso autor? De acuerdo a la prestigiosa revista científica Science, cuando era adolescente, en la década de 1950, Vaclav Smil pasaba mucho tiempo cortando leña. Vivía con su familia en un pueblo remoto en lo que entonces era Checoslovaquia, enclavado en el bosque montañoso de Bohemia. En los paseos podía ver el Hohenbogen, una alta cordillera en la vecina Alemania Occidental.
A lo largo de su carrera, Smil, quizás el pensador más importante del mundo sobre energía de todo tipo según Science, ha buscado siempre la claridad. Desde su oficina, cerca de la Universidad de Manitoba (UM) en Winnipeg, Canadá, el académico de 77 años ha producido docenas de libros durante las últimas cuatro décadas. Recorren una serie de temas, incluidos los problemas ambientales de China y la transición dietética de Japón de las plantas a la carne.
Es un asesino de estupideces
DAVID KEITH
Smil ha obligado a los defensores del clima a tener en cuenta la gran inercia que sostiene la dependencia del mundo moderno de los combustibles fósiles y a cuestionar muchas de las optimistas suposiciones que subyacen a los escenarios para un rápido cambio hacia alternativas. “Es un asesino de estupideces”, lo definió David Keith, científico de la energía y el clima de la Universidad de Harvard.
GAS NATURAL
El pensador considera que la energía más razonable es el gas natural. Disponible en todo el mundo, es la más limpia de las energías fósiles, que cuando las quemas generan dióxido de carbono. Pasará mucho tiempo hasta que podamos obtener la electricidad que necesitamos solo de recursos sostenibles como el viento o el sol. Mientras tanto, la más eficaz es el gas. No hay discusión posible.
Fuente: elpais.com/eps/ y elconfidencial.com/economia