Redacción
De hacer 0 euros de caja y ver que su restaurante estaba en quiebra, a ganar al día siguiente 700 y tener el local lleno. Así de drástico y “hermoso” fue lo que vivió recientemente Joe Lastra, dueño de Hot Dogs Likes 1994 en Parla (Madrid).
Cuando la hija de Joe, Selena Lastra, lo vio llegar a casa derrotado, al borde del llanto el pasado miércoles y anunciando que el negocio familiar no llegaba a fin de mes y lo iba a cerrar en octubre, decidió pedir ayudar a través de la red social X (Twitter).
“La solidaridad ha sido increíble. Pasamos de los 0 euros a estar llenos por un tuit”, cuenta emocionado Joe Lastra a Madrid Total. Desde la publicación, los vecinos de Parla no han dejado que haya ni una mesa libre, como muestra de apoyo, e influencers gastronómicos y gente del sector han ido para darle difusión, consejos y ánimos para seguir adelante.
“Tener un restaurante de perritos calientes siempre ha sido mi sueño. Quería hacer lo mismo que empecé haciendo desde mi infancia”, explica Joe.
Joe creció en Barranquilla (Colombia) viendo cómo su padre vendía perritos calientes en un carrito callejero hasta que cayó gravemente enfermo. Joe, con solo 15 años y todavía terminando sus estudios, le pidió a su padre, ya postrado en la cama, que le dejara a él seguir con el negocio para que no se perdiera la tradición familiar.
Desde 1994, estuvo haciendo perritos en su tierra natal hasta que se mudó a España con su mujer. 25 años después, en Parla decide abrir su propio local, Hot Dogs Likes 1994.
La solidaridad ha sido increíble
Joe Lastra, dueño de Hot Dogs Likes 1994
El restaurante de Joe tiene perritos calientes, hamburguesas, tequeños, empanadas colombianas, arepitas, salchipapas… Pero sin duda, su especialidad son los hot dogs, con variedad de sabores, pan brioche artesanal y salsas especiales elaboradas por ellos mismos.
Desde los 3 euros (el perrito clásico) hasta los 12 euros (el Gran Danés, con una salchicha Bockwurst de 180 gramos) tienes para elegir entre numerosos perritos bien cargados de salsa, como la artesana de piña, y con numerosos ingredientes. Entre ellos, queso rallado, patata paja, queso mozzarella fundido, lomo de cerdo a la plancha, cebolla, curry, bacon, guacamole…
A pesar de que abrieron en plena pandemia en un pequeño local del centro de Parla, “la acogida fue sorprendente” y pronto necesitaron de un restaurante más grande. Ahora se encuentran en la Avenida del Sistema Solar, 13, a las afueras del municipio.
“Cometimos el error de alejarnos del centro. Esto ha venido mellando el negocio, y junto a la inflación, es muy difícil sostenerlo. Por eso llegué el miércoles pasado a casa hecho polvo”, informa el dueño del restaurante de perritos calientes.
A pesar de las dificultades, Hot Dogs Likes 1994 en Parla ahora puede colgar el cartel de ‘completo’ desde la publicación viral que ha hecho sacar el lado más solidario de la gente en estos tiempos tan complicados para los hosteleros.
Fuente: El Español