Redacción
En 2021, el Colegio Franciscano Pio XII, ubicado en São Paulo, Brasil, instaló paneles solares para generar energía limpia y renovable. Poco más de un año después, el espacio ya produce toda la electricidad que consume.
En la institución educativa privada, la planta fotovoltaica entró en operación en agosto de 2021. En los siguientes cuatro meses se generaron 71.000 kWh. En los primeros tres meses de 2022 se generaron aproximadamente 90 mil kWh.
Para que te hagas una idea, el consumo medio de una residencia en Brasil es de 165 kWh al mes, es decir, la energía solar que genera la planta del Colegio Pio XII sería suficiente para abastecer a unas 120 viviendas.
Toda la energía solar que se genera y no se utiliza, es decir, la energía excedente, se inyecta en la red de la concesionaria y se acumula para uso futuro en la propia escuela o en otras unidades escolares de las Hermanas de São Francisco da Providencia de Deus.
Inspiración
Según la dirección de la institución, el proyecto busca asegurar el autoabastecimiento en el consumo, además de ser un proyecto inspirado en los valores franciscanos de valorar la vida y la naturaleza.
“El uso de energía limpia sigue el lema franciscano de cuidar la naturaleza y esta innovación ayuda a los estudiantes a ser responsables con el medio ambiente”, dice Fátima Lopes dos Santos Miranda, directora de la escuela.
La planta sigue siendo una forma de mostrar a la comunidad escolar la importancia de preservar los recursos naturales, fomentar la conciencia ecológica en los estudiantes y reducir las emisiones de carbono en la práctica. “En nueve meses de implementación, la iniciativa evitó la emisión de 62,7 toneladas de gases de efecto invernadero, lo que equivale a aproximadamente 1.900 árboles plantados”, completa Fátima.
Finalmente, la planta también se utiliza como herramienta pedagógica y permite a los estudiantes conocer de cerca el proceso de generación de energía limpia. “Los alumnos conocen en la práctica cómo funciona y cómo se produce la energía”, concluye el director de Pio XII.
Fuente: El Horticultor
