Redacción
Ella es la primera niña española que ha sido tratada con terapia génica para curar la sordera que padece. La enfermedad de la pequeña Abril es causa de una mutación genética que afecta a un gen fundamental para que el sonido llegue al cerebro.
Para que Abril no tuviese un retraso en el habla y pudiera oír como cualquier niña de su edad, había que intervenir cuanto antes, puesto que si se retrasa demasiado la intervención, se corre el riesgo de que sea demasiado tarde para aprender a hablar.
Cuando les dieron el diagnóstico, el padre de Abril, Daniel Hernández, comercial extremeño de 39 años, se puso a buscar por internet. Descubrió los resultados de un ensayo clínico en China en el que varios niños con sordera de nacimiento habían vuelto a oír, e incluso a hablar, después de recibir un nuevo tratamiento de terapia génica. Cuando supo que en España se iba a abrir un ensayo similar, ni él ni su mujer tuvieron dudas.
La intervención se llevó a cabo el pasado 2 de Mayo. Los médicos de la CUN (Clínica Universitaria de Navarra), comandados por la doctor Manuel Marique, practicaron una pequeña incisión detrás de la oreja derecha de Abril, con el objetivo de llegar a la cóclea y, a través de un catéter, inyectar la terapia génica DB-OTO, desarrollada por el laboratorio estadounidense Regeneron. Dicho tratamiento, contiene la versión correcta del gen a través de unos virus inofensivos que penetran en las células cilíadas del oído y liberan su carga genética, devolviendo al paciente la capacidad de oir.
Abril ha sido la primera niña en España en ser tratada en este ensayo, que se está desarrollando también con gran éxito en EE.UU y Reino Unido. En España, también se está empezando a implantar en otros hospitales como el Ramón y Cajal en Madrid y el Materno-Infantil de las Palmas de Gran Canaria.
Los médicos aún no han detectado señales de audición en Abril. No es alarmante porque los primeros signos pueden llegar hasta seis meses después de la intervención. “Una cosa es que estemos colocando la pieza de dominó que falta, pero ahora debe empezar a funcionar y eso lleva su tiempo. Pero estamos esperanzados porque el grupo de China ha publicado ya los resultados y ven buenas respuestas”, confiesa Manrique.
Daniel ha declarado que no se lo pensaron un momento con tal de ofrecer la mejor solución al problema de su hija: «Queremos ser luz para toda esa gente que sufre este problema, que no tenga miedo, que hay otro tipo de soluciones».
Fuente: torrejoncillotodonoticias