Carlos Curbelo / NoticiasPositivas
El grupo de rosas antiguas, lo forman todas aquellas variedades existentes antes de 1.867, año en el que apareció el primer híbrido de té, que se considera el punto de partida para todas las rosas modernas, arbustos que aunaban varias características de crecimiento y floración, que no estaban unidas en ninguna especie hasta el momento.
Las rosas antiguas, son rosas mucho más rústicas y resistentes que la mayoría de rosas modernas. Tienen algunas limitaciones, con respecto a las modernas y entre ellas destacan una menor variedad de colores, la mayoría son blanco, rosa o rojo carmesí.
Actualmente hay colores albaricoque, amarillos, rojos casi negro, etc. una paleta de colores de lo más variados, incluso flores con múltiples colores en una misma rosa.
Otra diferencia importante radica en que la mayoría de las rosas antiguas florecen sólo una vez durante la temporada, mientras que las rosas modernas florecen muchas más veces.
Entre ellas podemos destacar la rosa Chinensis o rosa China, que es una rosa antigua que procede de la zona central de China y se introduce en Europa a finales del siglo XVIII, siendo toda una revolución para las rosas que hasta entonces se estaban cultivando y que quizá supuso uno de los cambios más significativos para el mundo de las rosas; o la rosa Noisette, fruto de una hibridación espontánea por el cruce de dos variedades de rosas, la rosa china Pink Parson y la rosa almizcleña Rosa Moschata, dando como resultado unas rosas trepadoras muy vigorosas y resistentes al frío.
Detalles a tener en cuenta para sembrar rosas en macetas
Si queremos cultivar rosales en macetas, es importante mantener un equilibrio entre un sustrato que drene lo suficientemente bien como para disminuir la probabilidad de pudrición de la raíz y un sustrato capaz de retener la humedad. Un medio de siembra que drene demasiado rápido se secará antes de que las raíces puedan absorber la humedad, y el suelo con demasiado material orgánico puede empaparse, fomentando la podredumbre de las raíces. La mayoría de los rosales, crecen mejor con un suelo bien drenado y rico en nutrientes.
Debemos escoger una maceta relativamente grande y alta a la hora de cultivar un rosal, ya que es una planta que genera unas raíces profundas, así que necesitaremos una maceta de entre 30-45cm. de alto cómo mínimo, que rellenaremos con una mezcla de sustratos, algo de abono orgánico y algunas pepitas de barro o picón.
Posteriormente, colocar la maceta en un lugar soleado y ventilado, pero protegida del sol de medio día si vivimos en una zona demasiado calurosa.
Cultivar rosales en nuestro patio o terraza es relativamente sencillo y nos ofrece la oportunidad de contar con flores de una amplia gama de color y aromas, a la vez que nos permiten en un momento dado, contar con flores frescas para hacer un magnífico centro de mesa barroco, de inspiración romántica.
