Redacción
Sacrilegio o buen gusto, depende a quién le preguntes. Sin embargo, lo que no se discute es que la cerveza con limón cuando mejor entra es en verano. Al fin y al cabo, lo único más refrescante que una cerveza fría cuando el sol pega duro es una cerveza con limón. Pero, y esto es una costumbre en general de todo tipo y tamaño de cerveza, lo cierto es que esta mezcla de cerveza con refresco de limón tiene más nombres que idiomas hay en China.
Hay quien piensa que su nombre más correcto es el de Radler. Al menos ese es el “Tipo oficial” que podemos ver en embotellados. En cualquier bar de España, sin embargo, te dirían que eso se llama “clara”. Pero también hay quien le llama “Shandy”. Y lo cierto es que ninguna de las tres cosas son lo mismo. Como bien han explicado en loscervecistas, podemos primero descartar a la “clara”. La clara es la cerveza normal a la que se le echa refresco de limón al servirla. En cuanto a Radler y Shandy, hablamos de elaboraciones que ya parten desde el embotellado de esa mezcla.
Aunque confundir una con otra no nos hará quedar como tontos ni entre los más cerveceros, lo cierto es que tienen algunas diferencias. La Shandy es la versión de la cerveza con limón de origen británico, al contrario que la Radler, que viene de Alemania. Su origen, de hecho, se atribuye a Enrique VIII.
En cuanto al nombre hay dos principales teorías. Recordemos que los términos se forman poco a poco y lo cierto es que ambos pueden tener parte de verdad. Una es que a la bebida mezclada con limón se la conocía en Reino Unido en el siglo XIX con el nombre de Shandygaff. Otra, que lleva el nombre un poco más atrás y podría ser el origen de esa Shandygaff, es que la mezcla aparece en una novela del siglo XVIII del escritor Tristam Shandy. Eso sí, esta última no estaba mezclada con limón sino con jengibre.
Actualmente tanto las Radler como las Shandy se suelen elaborar con cerveza tipo lager mezclada con refresco de limón o limonada. Además de ser más refrescantes, suelen ser más ligeras en cuanto a la carga alcohólica. Eso es común a ambas, pero mientras que las Radler solo son con limón, las Shandy admiten otro tipo de mezclas. Estamos en la era de las cervezas artesanales, y hay quien hace Shandy sin limón, usando cítricos de otras procedencias como la lima, el pomelo o el citado jengibre.
Origen británico, el escritor Tristan Shandy y una bebida limonada llamada Shandygaff son el origen de esta refrescante apuesta cervecera. Aprovecha que ya se acaba el verano para intentar pillar todos estos conocimientos a base de cata mientras te recorre el gaznate una bien fresquita.
Fuente: Esquire