Redacción
Investigadores dirigidos por Mark Denham han encontrado una manera de modificar genéticamente las células madre para aumentar su capacidad de generar las células nerviosas específicas necesarias para tratar el Parkinson. Este paso adelante reduciría los tiempos de recuperación, el riesgo de recaídas y el uso de medicamentos.
Una nueva línea de células madre puras para generar neuronas y cerebros en miniatura para estudiar en profundidad la enfermedad: estos son los nuevos caminos que prometen contribuir significativamente a futuras terapias contra el Parkinson.
El primer estudio se publica en la revista Nature Communications y está dirigido por el Instituto Danés de Investigación de Neurociencias Traslacionales de la Universidad de Aarhus, con la participación también del Instituto Científico San Raffaele de Milán.
Los métodos actuales no permiten que las células madre se transformen en neuronas con mucha precisión.
Por este motivo, los investigadores liderados por Muyesier Maimaitili y Muwan Chen reprogramaron las células madre para evitar que generaran tipos incorrectos de células nerviosas, dirigiéndolas únicamente hacia las llamadas neuronas dopaminérgicas, células que producen dopamina y están implicadas en el control motriz, precisamente lo que se pierde en el Parkinson.
El segundo estudio, publicado en la revista Nature Methods y liderado por el Instituto de Biotecnología Molecular de la Academia de Ciencias de Austria, logró por primera vez obtener un organoide, es decir, un conjunto estructurado de células que reproduce las funciones de un órgano.
Las neuronas dopaminérgicas también están en el centro del estudio austriaco dirigido por Daniel Reumann. De hecho, el organoide obtenido en el laboratorio reproduce la estructura y el funcionamiento del circuito dopaminérgico, aún poco conocido a pesar de su importancia para la enfermedad de Parkinson.
Fuente: ansalatina
