“Cortamos las pencas maduras, sin matar la planta, para limpiarlas y triturarlas” explican los creadores de este nuevo tejido ecológico
Redacción
Un tejido libre de crueldad animal, libre de químicos tóxicos y biodegradable. Dos jóvenes mexicanos desafían la moda actual y demuestran que esta industria puede ser más sostenible. Lo mejor de todo, la innovación de Adrián López Velarde y Mars Cázarez provino de algo muy presente en el paisaje del país: el cactus.
Todo comienza con el cultivo de la especie Opuntia ficus-indica en la ciudad de Zacatecas, capital del estado homónimo. «Es una familia de cactus que no necesita riego, tiene espinas muy pequeñas y es resistente al frío, lo que nos permite garantizar una producción continua de materia prima durante todo el año»
Después de cortar las pencas maduras, sin matar la planta, para limpiarlas y triturarlas, se secan al sol durante tres días consecutivos. El siguiente proceso es refinar la molienda a un nivel apropiado de pulverización. Luego, de este polvo, una proteína presente en el cactus se extrae mediante un método de congelación. Finalmente, se hace una mezcla (que patentamos) entre este extracto y el polvo de cactus, entre otros aditivos naturales que nos permiten hacer la conexión molecular entre la química orgánica y sintética, preservando el rendimiento, la estética y la calidad del material a ser fabricado
La mezcla obtenida a lo largo de este proceso se puede agregar al algodón o poliéster reciclado e incluso a una mezcla de estas sustancias; esto varía según las necesidades del cliente para «aumentar el contenido sostenible del producto final». Incluso los pigmentos también pueden ser de origen vegetal. El punto aquí es que la pareja pretende convertirse en proveedores importantes, abasteciendo a la industria de la moda, muebles, artículos de cuero en general e incluso a la industria automotriz.
Actualmente, la compañía del dúo, llamada Adriano de Martí, tiene dos hectáreas de cultivo, pero con una capacidad de expansión de hasta 40 hectáreas. El potencial de producción actual es de 500 mil metros lineales por mes de piel vegetal.
DE MÉXICO AL MUNDO
Adrián López y Marte Cázarez nacieron el mismo día, en el mismo mes y en el mismo año. Pero fue solo en Taiwán en 2011 que sus historias se cruzaron. El primero es de Aguascalientes y estudió Política Global y Economía en la Universidad de Tamkang en Taiwán, mientras que el segundo es de Culiacán, se especializó en Negocios Internacionales en Monterrey Technology y fue a la isla asiática para aprender chino.
De regreso en México, ambos con experiencia trabajando en la industria de la moda y muebles, decidieron unirse para desarrollar un material sostenible que cubriera las necesidades de estas industrias.
Después de dos años de investigación, varias pruebas y errores, finalmente, el julio pasado, se obtuvieron las primeras muestras exitosas del material. Nació la marca Desserto, un fabricante de piel de cactus orgánica libre de ftalato y PVC. El producto es súper resistente y tiene una durabilidad mínima de 10 años. También se puede personalizar según el gusto y las necesidades de cada cliente en grosor, colores, texturas, soportes, resistencia a la rotura y a la tracción, flexibilidad, entre otras demandas del mercado.
Fuente: elhorticultor.org