Comer lentejas o uvas, besarse bajo el muérdago, intercambiar regalos o la decoración del árbol son algunos de los rituales típicos durante las fiestas
Redacción
Las Navidades son probablemente las festividades más importantes en España, teniendo en cuenta el arraigo de la cultura católica… Una época repleta de tradiciones, villancicos, luces de navidad y espíritu navideño transmitidos de generación en generación.
La Navidad alberga muchas curiosidades con tradiciones y costumbres que se han ido forjando a lo largo del tiempo y que ya forman parte de nuestra manera de vivir estas fechas. Son muchas las costumbres típicas que alberga la Navidad en aquellos lugares en los que se celebra, como por ejemplo, poner un árbol. Sin embargo, hay otras tradicionales que solo encontramos en el territorio español y que pueden ser curiosas para el resto.
Comer lentejas
Comer lentejas es probablemente una de las costumbres de Navidad que pueden resultar más extrañas. Al igual que con las uvas se considera que las lentejas traen la buena suerte, concretamente, se dice que comerlas tras las campanadas atraerá a la buena suerte durante el nuevo año.
Comer uvas en Nochevieja
Existe una tradición muy peculiar en Nochevieja: tomar 12 uvas con las 12 campanadas a las 12:00 de la noche para dar la entrada al Año Nuevo. Esta costumbre se dice que trae buena suerte, de tal forma que si consigues comer las 12 uvas a tiempo, tendrás un buen año. En caso contrario, puede que tu año venga con algún infortunio, según los más supersticiosos.
Además, concretamente, según la tradición, cada uva representa un deseo para cada uno de los meses del próximo año, de ahí que sean 12 uvas. En cualquier caso, más que la proyección de unos deseos, se trata de una costumbre arraigada en España que todo el mundo hace aunque a veces sin un significado.
En cualquier caso, esta costumbre curiosamente nació en España, aunque a día de hoy esta tradición se haya extendido a otros países como Portugal o Latinoamérica. Sin embargo, ¿cómo surgió esta tradición de comer uvas en Nochevieja?
Con respecto al origen de esta tradición, existen distintas teorías. En primer lugar, existe una teoría que sitúa el comienzo de esta costumbre en la Nochevieja de 1909, un momento en el que empezaron a tomarse gran cantidad de uvas.
De hecho, se considera que este año se dio una muy buena cosecha de esta fruta, de tal forma que los productores decidieron dar más salida al producto vendiéndola como “uvas de la suerte”. Sería entonces cuando se empezó a implantar esa costumbre de poner 12 uvas a medianoche por los 12 meses del año.
En este sentido, debido a este buen año de cosecha de uvas, esta fruta pasaría a representar la abundancia, algo que se suele anhelar y que muchos españoles tienen entre su lista de deseos para el próximo año.
Sin embargo, existen otras teorías para explicar esta costumbre debido a que en los periódicos de 1882 ya existen menciones de esta tradición. Según se cuenta en este año época la clase burguesa solía beber champán y comer uvas durante la cena de Nochevieja.
En consecuencia, como acto de protesta un grupo de madrileños decidieron hacer una sátira de esta tradición de los ricos aristócratas, de tal forma que acudieron a la Puerta del Sol para comer uvas acompañados del sonido de las campanadas. De ahí surgiría la tradición y sobre todo, el propio acto de acudir a la Puerta del Sol a comer las uvas.
El 2 de enero de 1894 el periódico español El Correo Militar incluía lo siguiente entre sus páginas: “La imperecedera costumbre de comer las uvas al oír sonar la primera campanada de las doce, tenía reunidas en fraternal coloquio a infinidad de familias, y todos a coro gritaron: ¡Un año más!”.
Por lo que podemos saber que ya desde el siglo XIX esta tradición existía, aunque es probable que se volviese más popular a raíz de esa cosecha tan abundante de 1909, y por lo tanto se instaurase ya para no irse en las costumbres españoles en el siglo XX.
La tradición de besarse debajo del muérdago
En Nochebuena existe la costumbre de que las parejas se besen bajo el muérdago, como forma de encontrar un amor próspero y apasionado. Un símbolo de suerte y amor para las parejas, sobre todo muy popular en el norte de Europa y en Estados Unidos. Pero la realidad del origen de esta costumbre, viene de una antigua tradición de los escandinavos, quienes consideraban que esta planta era fuente de paz.
La decoración del árbol
Antes de que los árboles se decorasen con luces de Navidad o con las típicas bolas y adornos navideños modernos, los abetos de Navidad solían decorarse con velas y manzanas. Las velas representaban la purificación y la luz, mientras que las manzanas venían a representar la abundancia.
Poco a poco fueron integrándose nuevos elementos como las campanas, las cuales representan júbilo y protección, también las estrellas para atraer la felicidad en la familia, los lazos para representar la unión y las bolas también como símbolo de abundancia, al igual que las manzanas.
Intercambiar regalos
Aunque las compras y regalos navideños en muchas ocasiones se relacionan con un invento de las grandes superficies para fomentar las compras en estas fechas, la realidad es que esta tradición viene de varios siglos atrás y tiene tres orígenes posibles.
Esta celebración se realizaba en la Antigua Roma en diciembre y tenía como objetivo rendir tributo al dios del grano y la agricultura. En la Saturnalia se solían intercambiar regalos como forma de atraer la buena fortuna para la siguiente cosecha.
Fuente: El Español