Redacción
La clamidiosis o psitacosis es una de las enfermedades más comunes en las aves y, entre las que pueden habitar en nuestros hogares o jardines, las pistácidas, como las cacatúas ninfas y los periquitos australianos, se encuentran entre las que más suelen infectarse.
Dado que la clamidiosis es una zoonosis, es decir, se puede transmitir a los humanos, es aún más importante que los cuidadores de aves conozcan esta enfermedad, sepan detectar sus síntomas y actúen en caso de contagio.
La clamidiosis es una enfermedad causada por bacterias intracelulares de la familia Chlamydiaceae. Según la clasificación actual, esta familia se divide en dos géneros: Chlamydia y Chlamydophila. Es dentro de este segundo grupo donde se encuentra Chlamydophila psittaci, la especie responsable de la clamidiosis en las aves psitácidas, por lo que es responsable de la clamidiosis en las cacatúas. Anteriormente, esta bacteria se llamaba Chlamydia psittaci.
¿La clamidiosis aviar se contagia a humanos?
Sí, la psitacosis o clamidiosis en las aves, también llamada clamidiofilosis, ornitosis o fiebre de los loros, es una zoonosis, es decir, las aves portadoras de esta bacteria pueden transmitirla a los humanos. Esta transmisión ocurre por contacto directo entre humanos y aves o por inhalación de partículas presentes en la orina o polvo de las plumas.
De todos modos, la incidencia de psitacosis o clamidiosis aviar en humanos es muy baja, a pesar de que existen miles de aves portadoras de esta enfermedad. La mayoría de las personas son resistentes a las bacterias a menos que el sistema inmunológico esté comprometido. En cualquier caso, es importante alertar sobre el hecho de que la transmisión es posible, ya que algunos casos de clamidiosis en humanos pueden ser fatales si no se tratan adecuadamente.
Síntomas de clamidiosis en aves
Como otras aves psitácidas, las cacatúas y los periquitos pueden infectarse con C. psittaci, aunque no son las únicas, ya que la psitacosis o clamidiosis aviar también afecta especialmente a las palomas y a los pavos. En cualquier caso, las aves infectadas por esta bacteria pueden ser asintomáticas, es decir, pueden no presentar síntomas, a pesar de ser portadoras y, por tanto, pueden infectar a otras aves y humanos. Las cacatúas, por ejemplo, pueden vivir muchos años como portadoras sin mostrar ningún síntoma.
Los problemas surgen cuando el sistema inmunológico del ave está inactivo. Los síntomas de clamidia en avespueden ser:
- Diarrea o heces acuosas.
- Conjuntivitis y secreciones oculares.
- Estornudos y secreción nasal.
- Apatía.
- Anorexia.
- Pérdida de peso.
- Somnolencia.
Los síntomas de la psitacosis o clamidiosis aviar, tanto en cacatúas como en periquitos o palomas, no son muy específicos y, además, pueden verse afectados diferentes órganos, como el hígado, el bazo, el sistema respiratorio y el tracto gastrointestinal. Por ello, es fundamental consultar con a tu veterinario de confianza si convives con una de estas aves y notas algún cambio en su comportamiento.
Es importante recordar que ningún ave debe permanecer confinada en una jaula las 24 horas del día. Si has encontrado un ave malherida, has acudido al veterinario y has decidido cuidarla, ten presente que necesitará disponer de espacio y cierta libertad para poder volar; la jaula debe ser simplemente su refugio, el lugar al que acudir si quiere esconderse o descansar.
Tratamiento para la clamidiosis en aves
Tanto si una cacatúa ninfa como si una paloma o un periquito sufre esta enfermedad, el tratamiento veterinario es fundamental. Existen diferentes protocolos de tratamiento para la psitacosis o clamidiosis aviar y el veterinario/a elegirá el que mejor se adapte a cada caso.
El tratamiento más común es la terapia con antibióticos, que puede ser oral, soluble en agua o inyectable. Si solo hay un ave enferma en el hogar, es probable que la opción inyectable sea la mejor debido a su efectividad. Sin embargo, si hay más de un ave contagiada, la opción soluble puede ser más práctica, aunque es difícil controlar la cantidad de agua que bebe cada ave.
Por otro lado, como hemos comentado en el apartado destinado a los síntomas, la región ocular a menudo se ve afectada por clamidia, provocando secreción ocular. Por ello, si es el caso de tu ave, el veterinario/a puede recetar el antibiótico en forma de gotas para poder aplicarlo directamente sobre los ojos.
Prevención de la psitacosis en aves
Como ya hemos comentado, las aves pueden transmitir esta bacteria a otras aves a través de secreciones nasales, orales o fecales. Por este motivo, es fundamental mantener limpio el entorno de las aves en todo momento. En los lugares con muchas aves, el riesgo de psitacosis existente es mucho mayor y se debe redoblar el cuidado. La limpieza regular debe incluir bebederos y comederos, no solo el área donde hay desechos.
Otra medida preventiva es controlar el número de aves. Una alta densidad de población aumenta el riesgo de clamidiasis y hace que sea más difícil mantener todo desinfectado. Siempre que decidas adoptar o acoger una nueva ave, déjala en cuarentena antes de presentarla al resto de aves. De esta manera, podrás detectar cualquier signo clínico antes de correr el riesgo de transmitir cualquier enfermedad a otras aves sanas. Esto es especialmente importante para aquellas asociaciones o centros de rescate que recogen aves en condiciones comprometidas con el fin de ayudarlas. En casos particulares, nuevamente, insistimos en la importancia de disponer del suficiente espacio en casa para que el ave o las aves puedan disfrutar de una buena calidad de vida.
Fuente: Experto Animal