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    La población mundial de rinocerontes ha crecido en los últimos 20 años

    El pasado 22 de septiembre se celebró el Día Mundial de los Rinos con buenas noticias, fruto del exitoso trabajo de conservación de ONG

    Redacción

    Gracias al trabajo de WWF (Worldwildlife.org) sobre el terreno en Nepal, en el último censo realizado en este país centroasiático el número de rinos indios ha subido a 752, 107 más de los que había en 2015. Se consolida así la tendencia de recuperación en un país ejemplar en la lucha contra el tráfico que, en 2005, sólo tenía 405 rinocerontes.
    El éxito de Nepal no es el único. Otro es el protagonizado por el rino negro que llegó a ser la especie de rino más abundante de las 5 existentes. Pero en poco más de tres décadas el furtivismo diezmó al 98% de la población, quedando solo 2.410 en 1995.

    Gracias al trabajo de WWF, la especie se ha ido recuperando y hoy 5.500 rinos negros viven libres en 12 países. Han creado 13 nuevas poblaciones en un territorio seguro equivalente a 250.000 campos de fútbol, donde nacen y crecen nuevas esperanzas.

    Además, en África existen unos 18.000 rinocerontes blancos libres, otro gran éxito de conservación ya que en 1900 solo quedaban 100. Todos ellos son claros ejemplos de que, con ayuda, la recuperación de las especies amenazadas es posible.

    Pero el tráfico de cuerno de rinos continúa por la falsa creencia de sus poderes afrodisíacos y anticancerígenos.

    NO BAJAMOS LA GUARDIA

    Así afirman representantes de WWF pues dos especies asiáticas están en peligro crítico de extinción: el rinoceronte de Java (sólo quedan 60 ejemplares) y el rino de Sumatra (menos de 80).

    Todos los rinos están protegidos, son pacíficos, comen plantas y no tienen enemigos naturales, salvo uno y muy feroz: el ser humano. A pesar de que su cuerno no tiene ningún poder afrodisíaco ni cura el cáncer (solo es queratina, una masa de pelo endurecido como nuestras uñas), estas supersticiones alimentan el tráfico de especies y la codicia humana, lo que ha llevado a estos animales al borde de su extinción.

    Movido por estas falsas creencias, el precio del cuerno de rino duplica al del oro o la cocaína en los mercados ilegales. Estas mafias actúan a escala global y son menos perseguidas que otros delitos como el tráfico de armas y drogas. Como consecuencia de esta impunidad, cada día, los furtivos asesinan a una media de 3 rinos en zonas salvajes.

    Fuentes: World Wild Life y WWF