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    La bóveda de las semillas

    En Noruega se encuentra la mayor caja fuerte del mundo, que guarda un ejemplar de cada semilla existente en los bancos genéticos de todos los países para preservar la biodiversidad

    Redacción

    Una inmensa caja fuerte esconde el mayor tesoro del mundo y no se trata de dinero, sino de semillas. La Bóveda Global de Semillas de Svalbard, en Noruega, es un depósito donde resguardar un ejemplar de cada semilla existente en los bancos genéticos de todos los países para ser replicada en caso de desaparición a causa de catástrofes naturales o conflictos bélicos. Es una contribución noruega a la biodiversidad del planeta y una forma de asegurar el abastecimiento de alimentos para el mundo.

    En el interior de esta bóveda se almacenan semillas de miles de plantas de cultivo de todo el mundo.  El objetivo es preservar una especie de “copia de seguridad” de todas las semillas del planeta. Así, ante una catástrofe, la biodiversidad de los cultivos estará a salvo.

    No es un banco genético al cual los investigadores o interesados pueden recurrir, sino que está pensado para que los bancos genéticos nacionales o regionales guarden allí sus semillas para ser replicadas en caso de que se pierdan como consecuencia de catástrofes naturales o conflictos bélicos. Funciona como la caja de seguridad de un banco. 

    Debido al conflicto en Siria, en 2015 el Centro Internacional de Investigación Agrícola en las Zonas Secas (Icarda por sus siglas en inglés: International Center for Agricultural Research in the Dry Areas) en Alepo se convirtió en el primer banco genético en recuperar semillas de su depósito en la Bóveda Global de Semillas de Svalbard.

    El edificio de la bóveda es propiedad de Noruega y el servicio de resguardo es gratuito. No obstante, las semillas son propiedad del banco genético que las depositó allí. La bóveda es operada por NorGen (Centro Nórdico de Recursos Genéticos) en cooperación con el Ministerio de Agricultura y Alimentación de Noruega y la organización internacional Global Crop Diversity Trust.

    Actualmente hay más de un millón de muestras de semillas almacenadas; más de 6000 especies provenientes de 249 países.

    ¿Cómo surgió el proyecto?

    En 1984 se inauguró el Banco Genético Nórdico con semillas de plantas escandinavas conservadas en una mina en desuso. Debido a la incertidumbre sobre lo que sucedería con los recursos genéticos, no era posible que el banco fuera internacional. Con la entrada en vigor del Tratado Internacional de Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura en 2004 finalmente se hizo posible. Noruega tomó la iniciativa de construir el banco a un costo de aproximadamente 9 millones de dólares. En febrero de 2008 el gobierno noruego inauguró la Bóveda.

    Decidió construirse en Svalbard, una isla al norte de Noruega a 1000 kilómetros, elegida en principio porque es un lugar seguro; de hecho, se considera una zona desmilitarizada y protegida ambientalmente, con buena infraestructura y eficientes rutinas de transporte y distribución, con uno de los aeropuertos más septentrionales del mundo. Y, además, porque cuenta con “permafrost”, que es la capa de suelo permanentemente congelada que facilita la conservación de bajas temperaturas.

    La bóveda está construida en el interior de la montaña a 130 metros de profundidad y a 130 metros sobre el nivel del mar, lo que garantiza que el suelo esté seco. La cámara está construida a prueba de erupciones volcánicas, de terremotos de hasta 10 grados en la escala de Richter y de radiación solar y, en caso de falla eléctrica, el permafrost actuaría como refrigerante natural. La bóveda tiene una temperatura artificial de 18 grados bajo cero, pero en caso de corte eléctrico, la temperatura natural es de entre 3 y 5 grados bajo cero, lo que permitiría continuar conservando las semillas congeladas. La bóveda tiene capacidad para albergar 4,5 millones de semillas diferentes.

    Este trabajo es regulado por una cooperación global única porque todos los países necesitan semillas de otros países y regiones. La Bóveda de Semillas Global de Svalbard simboliza tanto la interdependencia global como la cooperación global.

    Fuentes: Embajada de Noruega, Ministerio de Agricultura de Noruega y NordGen.