Dos experiencias paralelas que sorprenden positivamente en Chicago gracias a la labor de las jóvenes apicultoras Leigh-Kathryn Booner y Jana Kinsman
Redacción
Las abejas son uno de los animales más cruciales que existen en nuestro planeta. Tan solo 70 de los 100 cultivos más importantes son polinizados por ellas, por lo que tendríamos mucho que perder si desaparecen.
Leigh-Kathryn Bonner es una joven apicultora de cuarta generación que le encanta compartir sus conocimientos y aprendizajes prácticos sobre las abejas, además, también es la fundadora y directora ejecutiva de Bee Downtown.
En el año 2011, Jana Kinsman decidió hacer una breve pausa en su carrera profesional para tomar un curso de apicultura urbana sin saber que esa experiencia cambiaría su futuro. Aprendió todo lo que podía sobre colmenas, pero lo que más llamó su atención, fue conocer los grandes beneficios que las abejas aportan a las ciudades, entonces puso manos a la obra.
Fue en Enero del 2012 cuando Jana puso en práctica todo lo que aprendió durante el curso, para darle vida a su emprendimiento bautizado como Bike a Bee. Se trata de un negocio que instala y mantiene colmenas alrededor de Chicago, especialmente en jardines comunitarios, granjas, escuelas y diversos espacios públicos. Hasta hoy, cuenta con 50 colmenas instaladas en poco más de 10 barrios.
Con Bee Downtown, Bonner instala colmenas de abejas en diferentes terrenos de cultivo para promover la agricultura. Pero también hace algo muy peculiar, pues instala colmenas en patios y azoteas de espacios corporativos y oficinas con el fin de que los empleados aprendan el funcionamiento de una colmena.
Una de las principales características de Bike a Bee es que todos los traslados, de una colmena a otra, son realizados en bicicleta. Una vez por semana Jana visita cada una de las colmenas, extrae la miel y la lleva directo hasta su pequeño taller en donde la empaca en frascos de vidrio. Además, cada frasco lleva una etiqueta indicando el barrio del que se obtuvo la miel con la idea de que el consumidor pueda conocer el origen del producto.
OBJETIVOS Y LOGROS
Bonner se ha asociado con varias empresas y fundaciones que protegen las abejas y que también instalan colmenas en sus espacios. Su objetivo ha sido siempre dar a conocer la importancia de estos insectos para el ecosistema y hacer que las personas sientan un profundo aprecio por todo lo que podemos aprender de ellas.
Actualmente, la miel de Bike a Bee se vende en mercaditos, locales naturistas y tiendas de abarrotes en Chicago, y por supuesto, a través de su propio sitio web. Además, Jana ocasionalmente organiza capacitaciones y talleres en los que comparte sus conocimiento para que más personas se sumen al mundo de la apicultura urbana.
Fuente: bikeabee.com * bee-downtown.com y themonopolitan.com