Redacción
El calentamiento de los océanos está en relación con la aparición de huracanes, motivo por el cual a menudo se escuchan teorías sobre la posibilidad de enfriar el mar con medios artificiales para debilitar la formación de estos fenómenos atmosféricos. Sin embargo ¿es ello posible realmente? Un grupo de científicos ha realizado los correspondientes ensayos en simulaciones de laboratorio y ha demostrado que, incluso si se pudiera enfriar el mar, ello resultaría “inútil”.
Incluso si tuviéramos el poder infinito de enfriar artificialmente y en la cantidad suficiente los océanos para debilitar un huracán, los beneficios serían mínimos. El estudio, dirigido por científicos de la Escuela Rosenstiel de Ciencias Marinas, Atmosféricas y de la Tierra de la Universidad de Miami (UM), demostró que, para empezar, la cantidad de energía que sería necesaria para enfriar el mar y debilitar un huracán antes de que toque tierra lo convierte en una solución altamente ineficiente para mitigar tales desastres.
“El resultado principal de nuestro estudio es que se necesitarían cantidades masivas de agua enfriada artificialmente para lograr un debilitamiento modesto de la intensidad del huracán antes de tocar tierra”, dijo el autor principal del estudio, James Hlywiak, graduado de la Escuela Rosenstiel de la UM.
“Además, debilitar dicha intensidad en cantidades irrelevantes no significa necesariamente que vaya a disminuir también la probabilidad de daños tierra adentro. Si bien cualquier cantidad de debilitamiento antes de tocar tierra es algo bueno, tiene más sentido centrarse directamente en estrategias de adaptación, como el refuerzo de infraestructuras, la mejora de la eficiencia de los procedimientos de evacuación y el avance de la ciencia en torno a la detección y predicción de tormentas inminentes”, añadió el investigador.
Para dar una respuesta científica a la pregunta de si es viable el enfriamiento artificial del océano para debilitar los huracanes, los autores utilizaron una combinación de teorías de interacción aire-mar y un modelo informático altamente sofisticado de la atmósfera.
En sus simulaciones por computadora, enfriaron áreas del océano de hasta 260.000 km2 (más grandes que el estado de Oregón y equivalentes a 21.000 kilómetros cúbicos de agua) en hasta 2 grados centígrados. Incluso ensayando con la mayor área de enfriamiento, los huracanes creados en la simulación solo se debilitaron en un 15 por ciento.
Además, la cantidad de energía extraída del océano para lograr esta pequeña reducción es equivalente a más de 100 veces la cantidad consumida en todo Estados Unidos en 2019.
“Se puede decir que la principal conclusión de nuestro artículo, es decir, que no tiene sentido tratar de debilitar los huracanes, debería ser obvio”, dijo David Nolan, profesor de ciencias atmosféricas en la Escuela Rosenstiel de la UM y autor principal del estudio.
“Y, sin embargo, numerosas teorías sobre la modificación de huracanes aparecen a menudo en los medios de comunicación e incluso se presentan para patentes cada pocos años. Estamos contentos de poder aportar algo a la literatura científica que aborda este tema”.
El estudio, titulado ‘El enfriamiento oceánico dirigido para debilitar los ciclones tropicales sería inútil’, se publicó en la revista Nature Communications Earth & Environment.
Fuente: Sport