Redacción
La desigualdad salarial ha disminuido en alrededor de dos tercios de todos los países en lo que va de siglo, pero persisten importantes diferencias salariales en todo el mundo, expuso un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) divulgado el pasado noviembre.
Gilbert Houngbo, director general de la OIT, afirmó que “el retorno a un crecimiento de los salarios reales es un avance positivo. Sin embargo, no debemos olvidar que millones de trabajadores y sus familias siguen padeciendo la crisis del costo de la vida que ha erosionado sus niveles de vida”. Además, “las disparidades salariales entre los países y dentro de ellos siguen siendo inaceptablemente altas”, apuntó Houngbo
El “Informe mundial sobre salarios 2024-25: ¿Está disminuyendo la desigualdad salarial a nivel mundial?” revela que desde el año 2000 la desigualdad salarial, que compara los salarios altos y bajos de los trabajadores, disminuyó en muchos países a una tasa promedio que osciló entre 0,5 y 1,7 % anual. Las disminuciones más significativas se produjeron en los países de bajos ingresos, donde la disminución anual promedio osciló entre 3,2 y 9,6 % en las últimas dos décadas, y el crecimiento real de los salarios mundiales promedio ha comenzado a aumentar de nuevo a medida que la inflación disminuye de manera progresiva.
La desigualdad salarial está disminuyendo a un ritmo más lento en los países más ricos: se reduce anualmente entre 0,3 y 0,7 % en los países de ingresos altos, y entre 0,3 y 1,3 % en los países de ingresos medios altos. Además, aunque la desigualdad salarial se redujo en términos generales, las disminuciones fueron más significativas entre los trabajadores asalariados que se encuentran en el extremo superior de la escala salarial.
El informe señala que los salarios mundiales han crecido más rápido que la inflación en los últimos tiempos. En 2023, los salarios reales mundiales crecieron 1,8 % y se proyecta un crecimiento de 2,7 % para 2024, el mayor en más de 15 años. Esos resultados positivos marcan una recuperación notable en comparación con el crecimiento salarial mundial negativo, de -0,9%, observado en 2022, un período en el que las altas tasas de inflación superaron el crecimiento salarial nominal.
INFLACIÓN
De acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), la inflación mundial, de 6,8 % en 2023, podría bajar a 5,9 % en 2024 y 4,5% en 2025, descenso congruente con el crecimiento de los salarios reales. Sin embargo, el crecimiento de los salarios ha sido desigual entre las regiones, y las economías emergentes han experimentado un crecimiento más fuerte que las economías avanzadas, según el informe.
Si bien las economías avanzadas del Grupo de los 20 (G20) registraron una disminución de los salarios reales durante dos años consecutivos (−2,8 % en 2022 y −0,5 % en 2023), el crecimiento de los salarios reales se mantuvo positivo durante ambos años en sus economías emergentes (1,8 % en 2022 y 6,0 % en 2023).
El retorno a un crecimiento de los salarios reales es un avance positivo
GILBERT HOUNGBO
El análisis de la OIT muestra que los patrones regionales de crecimiento salarial variaron considerablemente. Los trabajadores asalariados de Asia y el Pacífico, Asia central y occidental y Europa oriental experimentaron aumentos salariales reales a un ritmo más rápido que los de otras partes del mundo. También reconoce que a pesar de los avances recientes, los altos niveles de desigualdad salarial siguen siendo un problema acuciante.
La desigualdad salarial es mayor en los países de bajos ingresos, donde cerca de 22 % de los trabajadores asalariados están clasificados como mal remunerados. Las mujeres y los trabajadores asalariados de la economía informal tienen más probabilidades de estar entre los peor remunerados.
Fuente: ilo.org y ipsnoticias.net