Redacción
Un equipo internacional de astrónomos está elaborando el mapa en 3D más detallado del Universo, según se ha informado en una conferencia organizada recientemente por Berkeley Lab. El mapa muestra detalles precisos de una red cósmica de 7,5 millones de galaxias, pero cuando esté terminado en 2026 abarcará hasta 35 millones de galaxias, reflejando cómo era el universo hace 11 mil millones de años.
Para la elaboración de este mapa tridimensional, los científicos se han valido del Instrumento Espectroscópico para el Estudio de la Energía Oscura (DESI), que mide el efecto de la energía oscura en la expansión del Universo. El instrumento obtiene espectros ópticos de decenas de millones de galaxias y cuásares. Al descomponer la luz de cada galaxia en su espectro de colores, DESI puede explorar la profundidad del universo y crear el mapa tridimensional.
El proyecto está sumando galaxias a su catálogo a un ritmo de alrededor un millón por mes. Cuando el mapa esté terminado, ayudará a los astrónomos a comprender mejor el origen del universo y su dirección.
Por un lado, ayudará a buscar pistas sobre la naturaleza de la materia oscura y el papel que juega, tanto en la formación de galaxias, como en la expansión del universo. Comprender la historia de la expansión es crucial para aprender más sobre cómo la energía oscura influirá en el destino del universo, destacan los investigadores.
A medida que el universo se expande, aparece más energía oscura, lo que acelera más la expansión. Esta aceleración es fundamental para configurar el futuro del universo y conocerla mejor ayudará también a aprender más sobre el comportamiento pasado de la energía oscura. Eso es, exactamente, para lo que DESI está diseñado, matizan los investigadores.
Agujeros negros medianos
Por otro lado, el mapa 3D permitirá a los astrónomos comprender también el comportamiento de los agujeros negros de tamaño mediano en las galaxias pequeñas. Se cree que enormes agujeros negros habitan los núcleos de casi todas las galaxias grandes, como nuestra Vía Láctea. Pero aún se desconoce si las galaxias pequeñas contienen también agujeros negros (más pequeños) en sus núcleos.
Cuando el gas, el polvo y otros materiales que caen en el agujero negro se calientan, se forma un núcleo galáctico activo (AGN). En las galaxias grandes, los AGN se encuentran entre los objetos más brillantes del universo conocido. Pero en galaxias más pequeñas, los AGN pueden ser mucho más débiles, explican los investigadores en un comunicado.
Los espectros tomados por DESI pueden ayudar a resolver este problema, y su alcance a través del cielo proporcionará más información que nunca sobre los núcleos de las galaxias pequeñas. Esos núcleos, a su vez, darán a los científicos pistas sobre cómo se formaron los AGN brillantes en el universo muy primitivo.
Fuente: Sport