Piel más oscura, mandíbula más pequeña y un cerebro menor serán los principales cambios de la especie humana, según los científicos
Redacción
El mundo será muy distinto en los siglos por venir. El aumento de las temperaturas modificará los paisajes. Pero el clima extremo es solo un ingrediente más que sumar al combo aterrador que podría llegar. A los impactos severos en la salud de las temperaturas elevadas o los fenómenos meteorológicos extremos cabe sumarle las guerras, crisis financieras o aparición de nuevas enfermedades y epidemias.
Si los humanos no mueren en un apocalipsis climático o el impacto de un asteroide en los próximos miles de años cómo evolucionará nuestra especie. ¿Podrían las personas transformarse en una especie híbrida de seres biológicos y artificiales? ¿Cambiar de tamaño, color de pie o rasgos faciales? ¿Llegar a los 100 años pasará a ser normal?
Algunos artículos científicos han pronosticado cómo podría ser el ser humano dentro de miles o millones de años. El profesor de Paleontología y Biología Evolutiva de la Universidad de Bath, Nicolás R. Longrich, es uno delos científicos que ha conjeturado sobre esta cuestión.
Aunque parezca que todo sigue igual desde hace siglos, lo cierto es que como asegura en un artículo en The Conversation el Homo sapiens no es el final de la historia. “La evolución no se detendrá con nosotros, e incluso podríamos estar evolucionando más rápido que nunca”.
En sus palabras si bien la naturaleza ya no controla este fenómeno en las personas, el entorno antinatural creado —cultura, tecnología, ciudades— produce nuevas presiones selectivas muy diferentes a las que se enfrentaron en la edad de hielo. “Estamos mal adaptados a este mundo moderno; se deduce que tendremos que adaptarnos”.
Para especular a dónde va esto, el especialista se sirve en su artículo de las tendencias mostradas por la especie humana en los últimos 6 millones de años de evolución. Algunas continuarán, “especialmente aquellas que surgieron en los últimos 10.000 años, después de que se inventaron la agricultura y la civilización”.
Pasar los 100 años será habitual y es posible que la edición genética se asuma como algo normal
Según R. Longrich “hay razones para pensar que nuestros genes podrían evolucionar hasta que la persona promedio viva rutinariamente 100 años o incluso más”. Las especies sin depredadores evolucionan a vidas más largas y la expectativa de vida humana se ha duplicado en los últimos años.
A tenor de cómo avanza la ciencia, algunos científicos consideran ya que no está lejos superar los 150 años. Por el momento la ciencia apunta a esta edad como el límite de vida humana. La tecnología podría hacer incluso mayor la expansión de la longevidad.
Quizás en el futuro, sopesa un artículo de la BBC, los implantes se usarán simplemente para mejorar a una persona. “Además de los implantes cerebrales, es posible que tengamos partes más visibles de la tecnología como un elemento de nuestra apariencia, como un ojo artificial con una cámara que puede leer diferentes frecuencias de color e imágenes”.
Ambos artículos ven como posible que en el futuro la tecnología de edición genética que permite modificar a un embrión deje de ser controvertida , pasando a ser “poco ético no cambiar ciertos genes”. “Seguirá siendo selección, ahora es solo selección artificial. Lo que hacemos con las razas de perros, lo haremos con los humanos”, asegura a BBC Thomas Mailund, profesor titular de Bioinformática y Big Data en la Universidad Anglia Ruskin de Londres.
A medida que la vida sea más sedentaria y la fuerza física se vuelva menos necesaria, los humanos perderán densidad ósea y los músculos seguirán encogiéndose, estima R. Longrich. Las mandíbulas y dientes también se harán más pequeños y es probable que perdamos las muelas del juicio, ya que los alimentos modernos cada vez requieren menos masticación.
Población mundial
La población mundial lleva décadas mezclándose libremente y seguirá haciéndolo en mayor medida. Eso creará “un mundo de híbridos: afro-euro-australo-americano-asiáticos de piel morena clara, cabello oscuro, con un color de piel y rasgos faciales que tienden hacia una media global”, resume R. Longrich.
En BBC, el antropólogo Jason A. Hodgson predice que las áreas urbanas y rurales serán cada vez más diversas genéticamente. Asimismo considera que dado que las poblaciones en África se están expandiendo rápidamente, estos genes aumentarán por lo que “el color de la piel desde una perspectiva global se oscurecerá”.
Durante los últimos 6 millones de años, el tamaño del cerebro de los homínidos se triplicó impulsado por el uso de herramientas, las sociedades complejas y el lenguaje En cambio, los cerebros humanos se están volviendo más pequeños.
Este órgano alcanzó su punto máximo justo antes de que se inventara la agricultura y después empezó a menguar. Si bien no se conoce la razón de estos cambios, esto no tiene por qué significar que el ser humano sea cada vez menos inteligente, el cerebro de Einstein era más pequeño que la media, recuerda R. Longrich.
Fuente: Business Insider