Sign Up To The Newsletter

Lorem ipsum dolor sit amet, consectetuer adipiscing elit, sed diam nonummy nibh euismod tincidunt ut laoreet

    Se jubila y le deja la empresa a su empleada de confianza de toda la vida

    A sus 80 años, un empresario argentino y su esposa pensaron que su negocio tendría que heredarlo la trabajadora más antigua

    Redacción

    Juan Moreyra es originario de la provincia de Córdoba, Argentina y por casi 65 años dirigió junto a su esposa una empresa de neumáticos. Sin embargo, a sus 80 años empezó a tener algunos problemas de salud y decidió que su empresa la heredaría una persona muy especial para ellos.
    De esta manera, Juan y su esposa consideraron que la persona ideal para ocuparse de la empresa sería Deolinda, su empleada estrella que ha trabajado con ellos por cuatro décadas.
    Y aunque lamentablemente, la esposa de Juan falleció, el argentino siguió con el plan, como lo comentó para el periódico La Voz “Después de 64 años, he cambiado la firma. Esta decisión la habíamos tomado con mi esposa y con Deolinda… Mi salud no me permite estar más frente a la firma, pero todo seguirá igual, la atención continúa como antes, y cada vez mejor”.

    Y es que Deolinda empezó a trabajar con ellos cuando era una niña de 12 años y con el pasar del tiempo demostró toda su capacidad de aprendizaje que la catapultó como una empleada increíble.
    Cuando Deolinda se enteró de que ella continuaría dirigiendo la empresa, se mostró muy agradecida con los Moreyra, como lo mencionó para La Voz: “Soy de una familia muy humilde, de muchos hermanos. No podíamos estudiar, así que me mandaron a trabajar. Cuando me preguntaron qué sabía hacer, les dije que de todo, pero en realidad no sabía hacer casi nada. Así que todo lo que sé y quien soy se los debo a ellos”.
    Y fue por esta experiencia que Deolinda mantuvo su arduo trabajo en compañía de la pareja quienes se convirtieron en una parte primordial de su vida, desde su adolescencia hasta la actualidad, ya que gracias a la amabilidad de los Moreyra, Deolinda pudo celebrar sus quince años; también tuvo sus primeras vacaciones con ellos, quienes la llevaron como si fuera su propia hija y posteriormente, cuando Deolinda se casó, Juan fue el padrino y su esposa, la testigo.

    Todos estos momentos han sido muy importantes para la argentina quien expresó su inmensa gratitud hacia ellos dedicándoles unas palabras en una entrevista con La Voz: “Me dio la posta [la oportunidad, el relevo], es un gran compromiso y seguiremos con su sistema. La verdad es que estoy agradecida porque pensó en mí, no sé cómo explicarlo, es una emoción muy fuerte. Yo estuve con ellos todos estos años, y ellos siempre me ayudaron”.

    Fuente: La Voz