Irma Cervino / Noticias Positivas
Su risa nos contagió a todos a comienzos de este siglo. Juan Joya Borja saltó a la fama de la mano de Jesús Quintero y se hizo popular, querido e imitado tras sus apariciones en los programas El vagamundo y Ratones coloraos, en los que contaba sus vivencias y anécdotas acompañado de El Peíto. “Era verlos y ya no podías parar de reír”, recuerdan algunos de sus seguidores. Los tenía de todas las edades y también fuera de España. En Francia era admirado.
Su famosa coletilla de “‘cuñaooo” se hizo viral cuando las redes todavía estaban en pañales y se convirtió en un grito de guerra en encuentros y comidas familiares. Su diente solitario también sirvió para algún disfraz. Su risa interminable, entrecortada y única quedará para siempre en el recuerdo, a pesar de que él El Risitas ya se haya marchado ya de este mundo. El pasado miércoles por la tarde falleció en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, tras una recaída de su enfermedad.
Juan vivía desde hace tiempo en una residencia gestionada por la Hermandad de la Santa Caridad de Sevilla, donde van personas mayores que no tienen recursos y tampoco tienen familiares que se puedan hacer cargo de ellos. La fama tampoco es eterna.
A pesar de la tristeza que ha conmocionado a quienes lo conocían y a sus seguidores, desde Noticias Positivas queremos recordar los buenos momentos que Juan, El Risitas, regaló a miles de personas. Agradecemos cada carcajada que arrancó y con la que hizo la vida un poco mejor.