El galardonado es una figura importante en los círculos literarios y culturales noruegos
Redacción
Fosse ha sido galardonado con el Premio Nobel de Literatura por sus “innovadoras obras de teatro y prosa que dan voz a lo indecible”. Es el cuarto noruego que gana el premio más prestigioso de la literatura mundial.
Fosse, a quien el traductor estadounidense Damion Searles considera uno de los “veteranos estadistas de las letras noruegas”, trabaja en múltiples géneros y medios y escribe en una lengua llamada “nynorsk”, o Nuevo noruego, una de las dos formas escritas actuales del noruego, que sólo utiliza el 10 % de la población del país.
Anders Olsson, presidente del Comité del Nobel de Literatura, describió la obra de Fosse como una mezcla del “arraigo en la naturaleza y la lengua de su origen noruego” con las técnicas artísticas del modernismo.
A pesar de haber sido candidato al premio durante varios años, Fosse, al igual que otros galardonados europeos del siglo XXI como Elfriede Jelinek y el controvertido Peter Handke, sigue siendo un gran desconocido fuera de su país. “He estado entre los favoritos durante diez años, y estaba seguro de que nunca conseguiría el premio”, dijo Fosse en un comunicado emitido por su editor. “Sencillamente, no puedo creerlo”.
SEPTOLOGÍA
La ingente producción literaria de Fosse incluye unas 40 obras de teatro –el comité del Nobel lo definió como “uno de los dramaturgos más reconocidos y representados de nuestro tiempo”–, así como novelas, poemarios, ensayos, libros infantiles y traducciones.
Su primera novela, Rojo, negro (Raudt, svart), se publicó en 1983. La primera obra de teatro que se representó, Y nunca nos separaremos (Og aldri skal vi skiljast), se puso en escena en 1994. “Era la primera vez que probaba suerte en este tipo de trabajo, y fue la mayor sorpresa de mi vida como escritor”, dijo una vez sobre su primera obra. “Supe, sentí, que este tipo de escritura estaba hecha para mí”.
Supe, sentí, que este tipo de escritura estaba hecha para mí
FOSSE
Sin embargo, destaca una obra en particular: su monumental secuencia de novelas, la Septología, de casi 800 páginas y una sola frase. Está escrita después de que Fosse –ateo que había crecido en una estricta familia luterana– se convirtiera al catolicismo en 2013.
Este tour de force experimental, cuyo tercer volumen fue nominado al Premio Booker Internacional en 2022, se centra en un pintor envejecido y viudo, Asle, que vive en la costa suroeste de Noruega. Tiene cerca a otro pintor que comparte su nombre, pero que se siente solo y consumido por el alcohol –el propio Fosse abandonó célebremente la bebida hace muchos años, tras ser tratado en un hospital por intoxicación etílica–. Los doppelgängers se enfrentan a cuestiones existenciales sobre la muerte, el amor, la luz y la sombra, la fe y la desesperanza.
Fuente: THECONVERSATION