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    Dedica su vida a rescatar a la juventud de las peligrosas pandillas

    Este activista hondureño ha ganado la edición 2021 del premio Nansen que otorga Acnur

    Redacción

    Tras el asesinato de uno de sus hermanos, Santiago Ávila y su familia tuvieron que buscar protección en otra región de Honduras. Desde entonces, Santiago se ha dedicado a evitar que otras familias corran con la misma suerte.

    El activista humanitario Santiago Ávila, de 33 años, director de Jóvenes contra la Violencia, una oenegé que defiende a niños y jóvenes ante las pandillas en Honduras, ha ganado la edición 2021 del premio Nansen que otorga la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).

    Hace 11 años Santiago era un veinteañero que solo tenía en mente la música, pues era cantante de una banda de heavy metal en Tegucigalpa, hasta que explotó esa burbuja: su hermano menor Mauricio, de 16 años, fue brutalmente asesinado por una pandilla después que un familiar no pagase una deuda con uno de los rufianes.

    Por desgracia, los problemas de la familia no terminaron con la muerte de Mauricio. Poco después, al golpear a un pandillero que asaltó a su novia, el tercer hermano de Santiago rompió el código de conducta no escrito que reina en los vecindarios gobernados por las pandillas.
    Por temor a sufrir represalias, la familia Ávila abandonó su hogar en Nueva Capital, un vecindario en Tegucigalpa. Primero, se dirigieron a una región alejada dentro de Honduras; luego, se trasladaron al extranjero.
    La violencia endémica ha desplazado, por lo menos, a 247 000 personas dentro del país (dos de cada tres son menores de 30 años), y se estima que 185 000 personas lo han abandonado por ese motivo.
    Santiago dijo que “sentí que era muy cobarde simplemente irme, sin tratar de hacer algo por otras personas”.
    Poco después de la muerte de su hermano regresó a Tegucigalpa y ayudó a fundar Jóvenes contra la Violencia, que crea espacios seguros en los que los niños y adolescentes de seis a 20 años en situación de riesgo pueden escapar de la presión de los grupos criminales.

    ORGANIZACIÓN CON PERSPECTIVA

    En la década transcurrida desde su fundación, Jóvenes contra la Violencia pasó de ser un desorganizado grupo que se reunía en cafeterías para diseñar estrategias sobre cómo romper el aparentemente interminable ciclo de la violencia, y se convirtió en una prominente y respetada organización.

    El grupo en primer lugar ofrece sentido de pertenencia a los jóvenes cuya vida familiar tumultuosa o deprimente perspectiva de futuro les coloca como reclutas idóneos para pandillas que les ofrecen estatus y dinero fácil.

    Sentí que era muy cobarde simplemente irme, sin tratar de hacer algo por otras personas

    S. ÁVILA

    Alrededor de 400 voluntarios van a las calles de peligrosas ciudades y vecindarios en Honduras para sumar niñas, niños, adolescentes y líderes comunitarios a la organización, la cual ofrece una gran variedad de actividades deportivas, sesiones de orientación y actividades para fortalecer el tejido comunitario.

    Además, se acercan a las familias al borde del desplazamiento forzado, del tipo que enfrentaron los Ávila, y, tras mediar con líderes respetados de la comunidad, interceden para que no tengan que abandonar su hogar.

    El premio Nansen es una distinción para personas, grupos u organizaciones que van más allá de la obligación de proteger a personas refugiadas, desplazadas y apátridas. Lleva el nombre del explorador noruego Fridtjof Nansen, comisionado para los refugiados de 1921 a 1930 en la Sociedad de las Naciones.

    Fuente: Acnur y iPS